Dubai Font: un tipo de letra orientada al futuro para la ciudad y sus habitantes.
El Consejo Ejecutivo de Dubái se asoció con Microsoft y Monotype para crear una familia de tipos de letra que reflejara la naturaleza enérgica y dinámica de la ciudad. Esta familia de tipos de letra, que se ofrece de forma gratuita para el uso público y está disponible en Microsoft Office 365, va mucho más allá del Gobierno, ya que se diseñó para poner en armonía los alfabetos árabe y latino.
Si bien son varias las ciudades que han invertido en tipos de letra a medida, lo que diferencia a Dubai Font es la asociación con Microsoft y la distribución gratuita, tanto para el uso particular como gubernamental. Muchas ciudades utilizan tipos de letra específicos para el turismo o con otros fines utilitarios, pero Dubai Font va mucho más allá, ya que también es la expresión tipográfica de la población de la ciudad.
Para Nadine Chahine, que en aquel momento era directora de tipografía de Monotype en el Reino Unido, este proyecto también tenía un cariz personal. La diseñadora jefa, que en el pasado había residido y enseñado en Dubái, visita la ciudad con regularidad desde 2005, y ha presenciado de primera mano su crecimiento y desarrollo. La creación de una familia de tipos de letra a medida ofrecía una oportunidad para expresar parte del legado y el carácter de la ciudad, además de entrelazar sus componentes árabe y latino en el diseño. Lo más habitual es que estos dos alfabetos se desarrollen por separado, por lo que Dubai Font tiene el honor de ser el primer tipo de letra de Microsoft Office en crear de forma simultánea los alfabetos árabe y latino.
Esta armonía entre los alfabetos árabe y latino fue clave para el diseño, igual que el reflejo de la cordialidad con que tantas nacionalidades diferentes conviven en Dubái.
Como parte del proceso, hubo que realizar consultas de forma periódica, y el equipo de diseño tuvo que intercambiar archivos para verificar que los dos alfabetos encajaran a la perfección. En otras palabras, para conseguir el diseño deseado, había que trabajar en armonía. De vez en cuando, hubo que realizar algunos cambios sutiles en el diseño para garantizar la compatibilidad entre ambos alfabetos sin poner en jaque la autenticidad de ninguno. Por suerte, algunos rasgos del árabe se pueden equiparar sin problemas a determinados estilos del diseño latino.
«El árabe contiene muchas curvas suaves que cambian de dirección de repente, y era esencial que este rasgo estuviera presente en el diseño», explica Chahine. «También había que hacer referencia al movimiento del lápiz, pero de una forma sutil, ya que se trata de una letra de palo seco, que no es muy caligráfica».
Asimismo, el tipo de letra debía hacer alusión al legado árabe sin caer en el tradicionalismo, para personificar la mentalidad orientada al futuro de Dubái, y debía evitar un exceso de ornamentos para poder ser, en palabras de Chahine, «una buena mula de carga». «Hay que tener un pie en el pasado y el otro en el futuro; utilizar tu legado como base, pero manteniendo la mirada al frente».
«El diseño del alfabeto latino transmite serenidad, y el del árabe incluso más. Esa sensación de sosiego también debía estar presente», añade.
Además, la gran capacidad de adaptación que aporta el tono contenido resulta perfecta para los numerosos usos que acabará teniendo, tanto en manos del Consejo Ejecutivo como de la población. Chahine tiene un deseo especial: que acabe abriéndose camino en el mundo de la educación y que su naturaleza sosegada contribuya a generar un ambiente más persuasivo y acogedor.
Más allá de esto, Chahine cree que Dubai Font puede servir a un propósito cultural superior y ayudar a combatir la tendencia bajista del número de personas que leen y utilizan el árabe.
«Esta es la prueba de que el árabe puede ser moderno», explica. «A veces se percibe como una lengua anticuada y pasada de moda, pero disponer de tipos de letra que demuestren que se puede caracterizar de una manera moderna podría convencer a más personas para que vuelvan a leer en árabe».
«Es un gran ejemplo de lo que puede hacer una ciudad árabe contemporánea para fomentar la comunicación en árabe», añade. «Señala lo que el árabe moderno puede ser para las personas y las implicaciones que puede tener para la tipografía y la cultura a un nivel más amplio».
Para promocionar el lanzamiento, se erigieron por toda la ciudad esculturas gigantescas con formas sacadas del tipo de letra. El objetivo era que quienes las vieran se detuvieran para hacerse fotos e interactuar con la tipografía de una manera distinta a lo habitual. La población de Dubái ha recibido el tipo de letra con entusiasmo, y son varias las marcas y empresas que quieren ser las primeras en adoptar la fuente oficial de la ciudad, algo que también añade una nota de patriotismo.
Nadine Chahine.
Dubai Font refleja el cambio en la manera de percibir la tipografía y deja entrever las posibilidades que ofrece tanto a nivel cultural como de comunicación.
«El apoyo del Gobierno a la tipografía y a la innovación en las tipografías es una gran noticia», añade Chahine. «Lo que más me gusta de todo es que la tipografía forme parte de la expresión y la comunicación, así como la manera en que la ha acogido el público general, no solo las personas especializadas en diseño gráfico».
«Me encanta ver a personas normales y corrientes hablar sobre fuentes».